Un Villoutazo

Gracias a mi buen amigo voikot, leí este artículo.
http://www.granvalparaiso.cl/sexos/homos/matrimonio.htm .

La verdad es que nunca pesco estas discusiones, no ando con banderas flameando por la vida, pero en este caso puntual, sentí que mi ojo izquierdo comenzó a palpitar con cierto recelo, porque este caballero se mete con asuntos que van más allá de estar o no de acuerdo. Se mete con un derecho legítimo de cualquier ciudadano.

Así que le respondí esto:

"El señor quiere "una sociedad más respetuosa de los diferentes sexos o géneros que existen en su interior".
Una sociedad respetuosa, es aquella que no interfiere en la vida de otras personas decentes, que trabajan, que levantan al país y pagan impuestos. En definitiva, que siendo homosexuales, Mapuches, gordos o flacos, están incluidos dentro de los más de 15 millones de habitantes del país.
Los homosexuales van al supermercado, compran casas, autos y Super ochos.
Por lo mismo, su comentario resulta ofensivo y troglodita señor. Porque acá estamos hablando solamente de un derecho, de las mismas oportunidades; conceptos básicos de la convivencia humana.
Los heterosexuales se casan. Algunos por conveniencia, otros para pintar el mono, otros por amor. Como sea, hacen uso de lo que les corresponde. Por pagar cuentas y por abrirle la puerta al encuestador del censo y ofrecerles cafecito. No sé cuántos de ellos estarán concientes de los vacíos legales de tal contrato. Pero se casan.

Ley pareja no es dura dicen por ahí señor Gutiérrez. Y lo que usted está haciendo, es dar motivos contundentes, excusándose en su tolerancia, para truncar las acciones de otras personas.
Porque sí, hay homosexuales inteligentes allá afuera, que si toman la decisión de casarse, será porque lo estiman conveniente. Así mismo hay algunos estúpidos que pueden hacer mal uso de él. Tal como hacen los heterosexuales.

Su actitud, es muy similar a la de la vieja copuchenta de la esquina, que se mete en lo que no le importa. Lo peor, metiéndose en las decisiones libres, de personas que no están interesadas en su vida, en cómo usted vive el amor y su matrimonio legalizado.

Por eso considero un insulto la comparación que usted hace, de dos personas con plantas. Porque las plantas no leen este medio, es decir, no pagan su sueldo.

Creo que bajo ninguna circunstancia yo me casaría, pero a mis 23 años, tengo la mente lo suficientemente abierta y clara como para entender a los que sí lo quieren hacer. Ahora, la única forma de encontrarle la razón, con sus tan bien fundamentados párrafos, que hablan del compromiso y el amor, antes que el reconocimiento del Estado, sería que entonces no casáramos a los heterosexuales. No hay motivos contundentes, tal como usted postula.

Mucha suerte en su vida, y que nunca la falte nada".

Ya, me cansé.

Oye.. a propósito... ¡vayan este lunes a la conferencia empresarial!, tendremos "El tribunal de Dios" , en donde las personas expondrán sus casos frente a un tribunal de fieles... con escenografía onda Reforma Procesal. Lleven plata.

Nataniel Cox 59, frente a la Llama de la Libertad.